¿Qué es?
El Balón Intragástrico es un tratamiento contra obesidad, sin cirugía. Está indicado para personas con obesidad leve o moderada que por sí solas no consiguen perder peso.
¿Cómo funciona?
El balón intragástrico es un globo blando de silicona que se inserta en el estómago mediante endoscopia y se rellena con una solución fisiológica estéril, de forma que el balón hinchado ocupa una parte del estómago. Al tener el balón ocupando parte del espacio del estómago se consigue una temprana sensación de saciedad (el paciente se siente “lleno” antes) y de falta de apetito. Esto facilita que el paciente inicie un programa de modificación de hábitos alimenticios y de estilo de vida que le llevará a conseguir adelgazar.
¿Para quién está indicado?
Está indicado en pacientes con obesidad moderada, severa o mórbida que no han conseguido perder peso de forma mantenida con otros programas (de acuerdo a los criterios establecidos por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad).
Su uso para perder peso antes de una intervención de cualquier tipo puede reducir los riesgos asociados con operaciones en pacientes obesos.
¿Durante cuánto tiempo se lleva colocado el balón?
El balón intragástrico se lleva en el estómago durante seis meses. El seguimiento médico y por tanto el tratamiento en su totalidad dura dos años que es el periodo que se estima como mínimo para que el paciente interiorice los hábitos alimenticios y de estilo de vida que se pautan durante el programa de seguimiento por parte de nuestro equipo médico.
Una vez colocado el balón ¿Qué tratamientos hay que seguir?
La colocación del balón conlleva riesgos mínimos, pero es necesario llevar un control médico multidisciplinar posterior a la colocación. Existe un tratamiento dietético que enseña al paciente a comer de un modo distinto y por otra parte nuestro endocrino se encargará de vigilar aspectos como la diabetes o la hipertensión.
Adaptación al balón intragástrico
Los primeros días el paciente sentirá molestias a medida que su estómago se acostumbra a la presencia del balón. Puede sentir náuseas, o experimentar vómitos o diarrea hasta que su cuerpo se adapte.
Estas condiciones son normales y están previstas. Nuestro equipo médico proporciona al paciente instrucciones estrictas sobre su régimen de hidratación durante este periodo.
- Durante el primer día, es probable que solo tome unos sorbos de agua, en los días posteriores es fundamental beber mucha agua y evitar comer alimentos sólidos.
- La dieta a seguir durante los tres primeros días podrá incluir lo siguiente: Zumos, Leche, Sopas o purés poco densos, Gelatina y deberán evitarse los siguientes alimentos: Café, Bebidas gaseosas, Alimentos con grasa, Chocolate, Helados, etc
- …
- Durante estos días nuestros pacientes podrán telefonear a nuestro equipo médico para consultar cualquier reacción o molestia que sienta.
- Después de varios días con una dieta de líquidos el paciente estará preparado para empezar la transición a alimentos semisólidos y posteriormente a sólidos. La rapidez de esta transición dependerá de su progreso y de cómo esté tolerando su cuerpo los líquidos. Es importante realizar esta transición lentamente, sin intentar acelerar el proceso de adaptación.
Una vez finalizada esta transición, el paciente comenzará a reunirse periódicamente con nuestro equipo de asistencia médica. El equipo médico y el equipo de nutrición y dietética, dietista y resto de especialistas tendrán una función importante en la evaluación de sus necesidades para crear un programa personalizado.
Seguimiento del proceso y extracción
Después de las dos primeras semanas su cuerpo ya se habrá adaptado al balón, estará siguiendo un plan de nutrición y habrá reanudado sus actividades normales.
Durante los seis meses siguientes es fundamental reunirse con el médico para controlar la pérdida de peso, y con el equipo de asistencia para que le instruyan según su progreso. Este periodo es importante para mantener la pérdida de peso después de que sea extraído el balón.
Durante el periodo que tenga el balón intragástrico implantado, el paciente deberá seguir con atención y comunicar cualquier cambio inusual en la manera de sentirse.
¿Qué problemas puede dar el balón intragástrico?
Se trata de una técnica con más de veinte años de trayectoria médicamente contrastada, efectiva y de muy bajo riesgo.
No obstante, como en todos los procedimientos médicos, existe el riesgo de reacciones imprevistas, desconocidas y adversas a los medicamentos, procedimientos y materiales utilizados. Esto puede variar según las personas. Es probable que durante los tres primeros días sienta ciertas molestias, así como calambres, náuseas y vómitos.
Resultados ¿Cuánto peso se puede perder?
La cantidad de peso a perder dependerá de cómo el paciente adopte a largo plazo los cambios en su estilo de vida relacionados con la alimentación y el ejercicio; no obstante, nuestra experiencia nos demuestra que el paciente puede llegar a perder entre el 60 y el 80% del sobrepeso.
El verdadero éxito del tratamiento y por qué es tan importante la elección del equipo médico.
El balón ayuda al paciente a sentirse saciado, con lo que se reduce la necesidad de alimentos y se facilita al paciente la adaptación a nuevos hábitos alimenticios. No obstante, tan importante como el balón o incluso más es el trabajo desarrollado en paralelo por el equipo de médicos y dietistas que ayudarán al paciente a adquirir nuevos hábitos mediante un programa de pérdida de peso supervisado, que incluye una serie de visitas de seguimiento destinadas a “formar” al paciente en educación alimenticia (control de trastornos alimenticios, ansiedad, etc.)